Dioses de la cultura Olmeca

Antes de Cristo, existió, en América, una sociedad llamada Olmeca. Su ubicación geográfica se situaba en la parte sur de lo que hoy conocemos como México.

Los olmecas tenían una religión politeista, es decir que creían en distintos dioses. Estos, según ellos, le proveían poderes a los gobernadores y a la naturaleza. Cada ser vivo, objeto o material poseía un espíritu animal, con el que los dioses se alimentaban y daban fortaleza. Los dioses poseían parte de su cuerpo como animal y como humano.

Además, eran figuras a los cuales se les debía rendir muchos rituales y ceremonias.

Dioses de la cultura Olmeca

Dioses proveedor de alimentos

Entre la gran cantidad de dioses que tenía la cultura Olmeca, estos tenían y rendían tributo a dioses que se especializaban en ciertos aspectos como la comida.

Estos se encargaban de proveer alimentos para la comunidad, así como hacer que brotaran los frutos como el maíz y protegían las cosechas de las inundaciones.

Entre estos dioses de la cultura Olmeca están: El hombre de la cosecha, quien con su muerte hacía que brotara el maíz. A su vez, estaba Centéotl, este no solo hacía renacer al maíz, sino que protegía las cosechas y hacía que brotaran los demás frutos, como el algodón, diferentes semillas y camote.

Dios portador de fuerza y generador de guerreros

De la misma forma, todos los hombres pertenecientes a esta sociedad rendían tributo a Huelhuetéctol quien formaba parte de los dioses de la cultura Olmeca.

Este Dios era aquel que le traspasaba fuerza a los guerreros para que fuesen más fuertes y poderosos. Este fue creado y era nacido del fuego. Él les decía a los combatientes que hacer para poder ser más fuertes en los enfrentamientos y peleas.

Naturaleza dominada por dioses

Desde luego, todos los dioses de la cultura Olmeca controlaban la naturaleza. Sin embargo, existían alguno que se encargaba solamente de manejar el clima, la lluvia y la tierra.

El más importante, fue el Dios Jaguar. Este es quien controlaba a la tierra y, por ende, a todos los seres vivos y no vivos que habitaban en ella. Era él quien tenía el poder de destruir o crear armonía en la tierra.

Otro dios importante, y controlador de la naturaleza, era la Serpiente Emplumada. Ella era quien controlaba el agua y clima. Su poder consistía en mantener o descontrolar el orden del clima y el agua.

Por sobre todas las cosas, en la cultura Olmeca, los dioses eran lo más importante para la sociedad. Cada uno de ellos tenía un poder para ayudar o destruir a las personas. Hacían a los guerreros más eficientes en las batallas, los proveían de alimento y los protegía de cualquier mal que habitara en la naturaleza.


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